Saturday, February 9, 2008

El pasado como argumento para el consumo de carne.

Uno de los argumentos que se suelen dar en contra del vegetarianismo es que nuestros antepasados en determinado momento empezaron a ser cazadores para sobrevivir y que por tanto nosotr@s estamos legitimados a seguir depredando animales.
Es simpático recordar que nuestros inicios como depredadores de animales fueron con seguridad como carroñeros y no como cazadores, lo que le resta cierto romanticismo a esa visión de nuestro pasado. Pero fuera de anecdotas, lo importante para saber cómo relacionarnos con los otros animales no es ver qué se hizo en el pasado, sino qué debemos hacer nosotr@s hoy.

Las estrategias de supervivencia de nuestros antepasados no determinan nuestras decisiones morales con respecto a los animales hoy. Nuestra sensibilidad ética ha cambiado en muchos aspectos respecto a épocas pasadas. Multitud de prácticas que realizaban nuestros antepasados son consideradas a la luz de la razón hoy como verdaderos crímenes.
La historia de la humanidad nos ha dado la oportunidad de revisar constantemente nuestras creencias sobre lo que está bien y lo que está mal. Nuestra capacidad de aprendizaje ha permitido dicha revisión. Y la paulatina superación del racismo o del sexismo, son dos grandes ejemplos de ello. Este gradual crecimiento del respeto entre l@s human@s, nos ha hecho pensar en que el círculo de consideración moral debe crecer aun más para incluir también a los demás animales. Creemos que ha llegado el momento de empezar a ver a los animales no humanos, no como cosas para nuestro beneficio, sino como compañer@s de planeta a los que respetar. Son individuos que disfrutan de su vida y procuran evitar el sufrimiento en el mismo sentido que lo hacemos nosotr@s. ¿Por qué habríamos de utilizarlos como si fueran objetos inanimados?
Debemos, por ello, dar un paso más y trabajar para superar el prejuicio, similar al sexismo y al racismo, que sustenta la explotación animal: El especismo según el cual la especie de los individuos es motivo suficiente para despreciar sus intereses.
Insistimos en la idea de que lo qué hicieron en el pasado o lo que hacen otr@s en el presente no debe influir en nuestras decisiones éticas. No es legítimo justificar una conducta diciendo “también lo hace el vecino”. Debemos asumir nuestras elecciones morales con sinceridad y justificarlas con argumentos racionales, no apoyándonos en costumbres actuales o en tradiciones.

Conclusión.

Si buscamos en la esencia del ser humano, sin duda no encontraremos determinaciones gastronómicas. La etiqueta de “omnívoros” en el sentido de necesidad de comer carne es por ello errónea. Lo que sí podemos afirmar con seguridad es que muchos seres humanos tenemos la capacidad de revisar nuestros hábitos y creencias para mejorarnos y mejorar las relaciones con l@s demás. Es a esa naturaleza libre a la que queremos apelar con estos textos y reflexiones.

http://www.vegetarianismo.net/

Sunday, February 3, 2008

Tu mente tiene dueño... y no eres tú precisamente.



Y ustedes, ¿por qué creen que van de compras, porque quieren o porque asi han sido programados?

En el principio, los productos y servicios eran anunciados basados en sus bondades, en su utilidad.

Hoy día y desde hace mucho dicho enfoque desapareció por completo. Hoy nos han convencido que los productos y servicios nos proporcionan felicidad, peor aun, que sin ellos simplemente no podemos ser felices...

The Ad and the Ego.
http://www.moviebar.org/component/option,com_mtree/task,viewlink/link_id,5635/Itemid,3/

Documentary concerning how advertisements effect our sub consciousness and how advertisers manipulate buyers through psychological means.